CULIACÁN Sin., 15 de febrero de 2023.- El Ejercito mexicano invitó a estudiantes de primaria a presenciar la destrucción de armas que fueron decomisadas o donadas en el presente año en el estado de Sinaloa, como una muestra para educar a los niños a que recomienden a sus padres a no utilizar la violencia.
Se destruyeron 295 armas largas, 297 armas cortas, 1,377 cargadores y 44 mil 095 cartuchos de diferentes calibres en las instalaciones de la Novena Zona Militar en un evento encabezado por el General Alfredo Salgado Vargas, comandante de esta región y el gobernador del estado, Ruben Rocha Moya.
El General Salgado Vargas, señaló que desarrollar esta cultura de paz, es una de las metas contenidas en el Plan Nacional de Paz y Seguridad 2018 - 2024, enfatizando que desde el primer día, el Presidente Andrés Manuel López Obrador, en su carácter de Comandante Supremo de las Fuerzas Armadas, les indicó que uno de los objetivos fundamentales de su gobierno sería el devolver la paz y tranquilidad al pueblo de México, girando la instrucción de garantizar el bienestar de la población, apoyando a las corporaciones de seguridad, por lo que con acciones como esta, son expresiones tangibles de los resultados que se están obteniendo en este cometido.
Tras rendir honores a la bandera, en la explanada del 11o Grupo de Infantería Motorizado, ante la presencia de representantes de los poderes legislativo y judicial, así como autoridades federales, estatales y municipales, el Gobernador Rubén Rocha Moya destacó la importante coordinación con los mandos militares, cuya labor refirió ante los jóvenes estudiantes como ejemplo de entrega y compromiso con el bienestar ciudadano.
"Reitero mi agradecimiento al General Salgado, a los generales, a los jefes, oficiales, la tropa, por ese trabajo que hacen para la seguridad del estado. Reiteramos que seguimos trabajando conjuntamente las autoridades federales, particularmente el ejército y nosotros, para atacar aquellos hechos de violencia, sean del fuero común o sean del fuero federal", expresó el Gobernador.
Finalmente, las autoridades civiles y militares, rodeados de los jóvenes estudiantes, presenciaron el entierro de las armas y su posterior cobertura con cemento, para dejarlas completamente inutilizables.